¿Comprar para alquilar o para vender?
Obtener rentabilidad a través de un inmueble es una de las opciones más comunes entre los inversores particulares. La vivienda siempre ha sido un valor refugio, incluso en esta época marcada por la pandemia.
Por eso mismo, hoy queremos exponer dos casos para poder invertir: comprar y después alquilar o comprar para luego vender. En Property Buyers by SomRIE te explicamos las dos opciones para que seas tú quien decida cuál es la mejor opción.
Comprar y después alquilar
Adquirir un inmueble para ponerlo en alquiler es una de las inversiones más comunes. Según datos del Banco de España, la rentabilidad anual total de una vivienda (alquiler más variación de precios) se situó en el 5,2% en 2020, frente al 7,4% de 2019 y el 10,6% de 2018.
Por lo tanto, la vivienda sigue siendo un activo por el cual seguir obteniendo ganancias.
Los motivos para comprar y después alquilar:
- La situación económica actual y la imposibilidad de acceder a una vivienda en propiedad para muchos han hecho que la opción del alquiler gane protagonismo.
- Ingresos mensuales regulares: si se encuentra un inquilino que abone las rentas rigurosamente se dispondrá de una cantidad mensual asegurada. El inconveniente es que el capital invertido en la compra tardará años en recuperarse.
- Alquilar una vivienda suele ser más rápido que vender: si es una zona con alta demanda y si el inmueble está en buenas condiciones, es posible alquilar en poco tiempo.
Comprar para luego vender
La vía más habitual suele ser comprar la vivienda, reformarla y venderla. A este respecto, las estimaciones del sector calculan entre un 15% y un 20% de rentabilidad media con esta operación. Así que puede ser una gran opción para quien quiera realizar una inversión y sacar una buena rentabilidad en poco tiempo.
Las ventajas de esta gran alternativa son las siguientes:
- Mayor capacidad de adquirir un inmueble a buena precio: adquirir un inmueble antiguo o en mal estado dará mayor poder de negociación a la hora de adquirirlo.
- No es necesario realizar grandes obras: arreglar pequeños desperfectos o pintar la casa servirá para incrementar el valor del inmueble. No obstante, hay algunas acciones que sí podrían ayudar a revalorizar el inmueble en mayor medida y obtener mayor rentabilidad: adaptar la distribución de la vivienda a las necesidades actuales, actualizar cocina y baños, mejorar su eficiencia energética, entre otros.
- Los beneficios se perciben a corto plazo: dado que la demanda de este inmueble reformado será mayor, especialmente si está ubicado en zonas céntricas, habrá mayores posibilidades de añadir un valor adicional a su precio final.
¿Qué opción es mejor?
La respuesta dependerá de tus necesidades. Sin embargo, la compra de una propiedad para después ponerla a la venta genera ingresos de forma inmediata y tener un alquiler supone tener un ingreso mensual sostenido en el tiempo que al final podría suponer un importe mayor al que te has llevado por la venta.
Pero, elijas la opción que elijas la inversión inmobiliaria es siempre rentable. Eso si, si está bien hecha. ¿Si no has invertido nunca o simplemente necesitas que alguien te acompañe en esta tarea? En Property Buyers by SomRIE somos expertos en conseguir la inversión que más te convenga.
